Juan del Vado y Gómez de la Cruz. *Madrid, ca. 1625. † Madrid, 22-II-1691. Compositor, organista e intérprete del violón.
Era miembro de una familia de músicos al servicio de la corte madrileña. Su abuelo paterno Bernabé, muerto en 1632, tocaba la "trompeta bastarda española" y su padre Felipe fue corneta y violón de la Real Capilla durante 26 años. También su abuelo y tíos maternos eran músicos en la corte.
Juan del Vado aprende a tocar el violón en la "escuela de la dancería" de la corte. En 1647 oposita a la capilla musical del Duque de Nájera, diciendo de sí mismo que contaba con "las partes necesarias de habilidad para tañer tiple y bajo y partes de en medio de dichos violones" y que ya desde hacía seis años "de orden del mismo Patiño y Estéfano Limido ha servido con el violón contrabajo y tiple en muchas ocasiones sin plaza". En 1648 aparece esporádicamente tocando en los bailes de máscaras de la corte. En 1650 obtiene, aunque no en propiedad, una plaza de violón en la Real Capilla, ocupada anteriormente por su padre, con la condición de "acudir a casa del más antiguo [instrumentista de violón] a ejercitarse, y que será multado cuando faltare". En 1651 gana una plaza provisional como organista en la Real Capilla. Consigue finalmente la plaza de violón en propiedad en 1655. En 1662 aparece también como arpista de la Real Capilla. En 1667 la reina Mariana de Austria le concede una plaza de violón en su Real Cámara. Ese mismo año se casa con Isabel de Lazárraga, de la que va a tener un hijo llamado Sebastián que será nombrado en 1685 "médico de cámara de camino" de la Casa Real. Juan del Vado es maestro de música del joven rey Carlos II, al que enseña una hora diaria de clave durante los años de 1674 a 1676. Al sentirse enfermo, abandona sus obligaciones como profesor de música y organista, aunque sigue siendo violón de la Real Capilla y componiendo música. Muere el 22 de febrero de 1691 en la "calle de las Infantas, casas de Don Pedro Francisco Pérez de Sierra" y es enterrado en el convento del Carmen Calzado de Madrid. En su testamento dice que deja 20 misas, 96 tonos o villancicos y la música para seis obras escénicas.
Sabemos que escribió 24 misas de facistol, algunas de las cuales se han conservado en la biblioteca nacional de España y en el archivo de la catedral de Ávila. También sabemos que escribió unas Reglas de acompañar que José de Torres recomendaba a los estudiantes en su escrito titulado Reglas generales de acompañar (1702):
"(...) y para excusar confusión y prolijidad a los nuevos estudiantes, les bastará entender solamente los dichos ocho tonos como enseña Don Juan del Vado, organista que fue de la Real Capilla de su Majestad en un cuaderno manuscrito de Reglas de acompañar" (José de Torres, Reglas generales de acompañar, 1702: p. 9).Se han conservado también cuatro obras suyas para órgano.